domingo, 11 de julio de 2010

Vocación de servicio

No soy Dios, no es que hasta hoy no lo supiera, sino que a veces se me mezclan los cables y me parece que yo solita y armada de mi buena voluntad soy capaz de cambiar el mundo y ya que estamos en algùn rato libre colgarle una sonrisa al sol, una y otra vez, me choco el muro transparente de la realidad y harta de tanto chichón en la frente, mareada de tanta revolución, sorda de tanto grito acumulado me siento a pensar, a descansar, a esperar. Lo cierto es que me duele la carencia de Omnipotencia . Què sobervia, que egòlatra, que vanidad tan oscura se esconde tras mi actitud a veces empecinada en vestirse de agente de cambio. Eso me dijeron en la facultad, "vos vas a ser un agente de cambio" y me lo creì, me lo creì tanto que hasta a veces lo hago bien,sólo cuando el dolor me traspasa, cuando la angustia del otro se siente en mi propia piel, cuando una y otra y otra vez la soledad, el miedo, la bronca, el abandono, bailan a mi alrededor vestidos de fiesta invitando muchas veces a la parca a participar, entonces toda la teorìa aprendida, toda la pràctica entendida, toda la experiencia acumulada, no es màs que un montoncito de nada ocupando lugar en el bolsillo. No soy Dios, tengo dos manos que a veces pueden abrazar y otras obligatoriamente tienen que guardar distancia òptima Tengo voz, que puede decir, para mobilizar, alentar, comunicar pero a veces hay que callar porque hablar es traicionar, aunque las palabras se vuelvan pùas clavadas en el alma. Tengo ojos que a veces pueden ver lo escondido tras lo obvio y muchas veces tienen que cerrarse porque ver demàs encandila y eso dicen produce ceguera. Y entonces, cuando me pierdo, cuando en los libros no està el remedio, cuando sòlo estoy yo y mi sentido comùn, (como si sentir fuera comùn) cuando de mì depende enfrentar al toro o colocarme el paño rojo del esquivo, cuando todo consejo se vuelve inverosimil, cuando mi niña herida se lame las rodillas en un rincòn, mis locas sueltas me dicen arriesgate , y una voz adolescente y asustada me suplica en una carta, "ayudame".... yo detesto no ser Dios y detesto doblemente no tener la seguridad de ser atea y parece entonces que lo ùnico en comùn que tengo con Dios, es la vocación de servicio.-

2 comentarios:

  1. No te sientas Rota, sentite entera..
    Tus manos abrazan mas alla de la distancia, tu presencia acompaña con solo pensarte, sin concerte se que estas ahi, en algun lungar lejano, en algun rincon de este mundo inmenso, y tan pequeño a la vez, en la misma sintonia, en el mismo vuelo del que no me quiero bajar, se que estas...
    Y estas entera, tan entera y tan acompañada que te invito a intentar cambiar al mundo.. estas??? Te espero... Gon

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  2. Nunca había leído este comentario, Gracias Gon!!!!

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